La mirada se coloca de forma determinada sobre puntos específicos,
generalmente el entrecejo y la punta de la nariz, lo cual enfoca la mente además de activar estos dos centros. Eso crea concentración.
Se aplica mula bandha, o llave de perineo, lo cual sella el cuerpo y evita dispersión de la energía. De esta manera, con la energía con la respiración como generador principal, la energía comienza a circular por todo el cuerpo. Eso crea movimientos de prana.
Es una práctica completa, que hecha con
constancia y humildad, nos conducirá a otro
sitio, mucho menos explorado: el verdadero uno mismo.
El Ashtanga Vinyasa es una forma de yoga que se distingue por su
dinamismo. La práctica es una serie de movimientos asociados a la
respiración (vinyasas) que se interrumpen de tanto en tanto por posturas estáticas (asanas).
De esta forma se eleva la temperatura corporal. Traspirando se
desintoxica el organismo.